Cómo quitar las manchas de tus uniformes clínicos

Los uniformes de trabajo que se usan en entornos hospitalarios son propensos a la suciedad, las manchas y al derrame de todo tipo de líquidos que surgen en el día a día trabajando como profesional de la salud, ya sean médicos, enfermeros, técnicos, laboratoristas, veterinarios o más.

Los uniformes de trabajo que se usan en entornos hospitalarios son propensos a la suciedad, las manchas y al derrame de todo tipo de líquidos que surgen en el día a día trabajando como profesional de la salud, ya sean médicos, enfermeros, técnicos, laboratoristas, veterinarios o más.

Trabajando en este sector específico, los uniformes clínicos pueden ensuciarse con bastante regularidad, pero la buena noticia es que están destinados a limpiarse fácilmente. Para comenzar, no se desgastan tan rápido como la ropa normal gracias a los materiales resistentes con los que son elaborados. Sin embargo, para que un uniforme clínico dure más, es fundamental mantenerlo limpio, desinfectado y bien cuidado.

Las manchas en los uniformes no son algo nuevo para los médicos, y la verdad, son inevitables. ¡Tus uniformes probablemente lo han visto todo durante tus jornadas! La clave entonces es saber cómo tratar previamente los diferentes tipos de manchas antes de comenzar a lavar.

Ya sea que estés lidiando con salpicaduras de sangre de un paciente o la tinta de un bolígrafo que gotea, hoy te traemos algunas de las manchas médicas más comunes y cómo manejarlas.

• Sangre

Una de las manchas más habituales; la mejor manera de tratarla es empezar con un remojo en agua… ¡siempre fría!, ya que el agua caliente fijaría las proteínas de la sangre más profundamente en la tela, haciéndolas muy difíciles de eliminar. Es recomendable incluso añadir cubos de hielo al agua del remojo para que se mantenga fría por más tiempo.

Para este tipo de manchas, procura enjuagar la mayor cantidad posible de sangre de las fibras de la tela usando un chorro constante de agua fría sobre la misma, para luego frotar con un detergente de buena calidad hasta que desaparezca la mancha.

• Vómito, orina y heces.

Este tipo de manchas también son manchas de proteínas que deben tratarse primero con agua fría. Como primer paso, retirar cualquier partícula sólida con una espátula o cuchillo desechable; y procura no frotar, ya que la mancha se adherirá más a la tela.

Una vez más, enjuaga con un chorro constante de agua fría y trata con detergente fuerte y de calidad antes de lavar. También puedes agregar 1/2 taza de bicarbonato de sodio al agua de lavado para ayudar a eliminar el olor.

• Sudor

Puedes quitar las manchas de sudor fácilmente con una mezcla de 1 cucharada de vinagre en media taza de agua fría.

• Ungüentos o medicamentos a base de aceite

Para este tipo de manchas, comienza raspando el exceso de ungüento de la prenda. Luego, espolvorea generosamente talco para bebé o almidón de maíz sobre la mancha y deja reposar hasta que el aceite se absorba por completo. Luego se lava normalmente.

• Tinta

Lo sabemos, una de las manchas más comunes en uniformes médicos, es la de tus bolígrafos derramados en tus bolsillos. Para eliminarlas, mezcla agua y alcohol en un recipiente a partes iguales, y aplica la mezcla sobre la mancha usando una botella de spray o un trapo. Frota hasta que la prenda se vea completamente saturada del líquido y deja reposar por unas horas antes de lavarla. Otra opción es lavar la mancha con leche tibia.

• Café.

El café es el mejor amigo del profesional de la salud cansado… hasta que se derrama en su uniforme. Con este tipo de manchas, cuanto antes la remuevas, mejor será para tu ropa. Seca la mancha de inmediato con una toalla de mano o un pañuelo de papel para eliminar el exceso de líquido, y luego espolvorea un poco de bicarbonato de sodio sobre la mancha. ¡Y recuerda no frotar!

Para conservar tus uniformes clínicos en su mejor estado, es importante mantener las mejores prácticas al lavarlos y tratar las manchas rápidamente y de forma efectiva para que tus trajes médicos siempre luzcan y se sientan como nuevos.

Sabemos que después de un largo día de trabajo, lo único que deseas hacer es darte un baño refrescante antes de irte a la cama, y no precisamente ponerte a tratar las manchas de tu uniforme. Pero nuestra recomendación es cuidar tus trajes clínicos desde el primer momento que aparece la mancha; si bien puede parecer mucho trabajo al principio, con el tiempo verás los buenos resultados.

Saber cómo quitar las manchas de los uniformes médicos podría ser una de las mejores habilidades que puedas aprender fuera de la escuela de medicina (y de las que nadie te habló). Y recuerda que para cualquier mancha complicada siempre será buena idea dejarlo en manos de profesionales, es decir, ¡a un buen servicio de tintorería!

¡Mantén tu uniforme de trabajo siempre impecable y listo para tu próximo turno!

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