Vecinos de Isla Teja denuncian desenfrenadas fiestas clandestinas

[VALDIVIA] Muelle Los Castaños se ha convertido en un centro de consumo de alcohol y drogas en el que, lo de menos, son el incumplimiento de las medidas sanitarias.

No es común que a la hora de escribir un reportaje para la prensa local, los entrevistados pidan mantener sus identidades en secreto; ese es el caso del siguiente reportaje. ¿La razón? Miedo a represalias.

Ya hace unos meses que los vecinos del sector sur de la Isla Teja de Valdivia, deben convivir con estruendosas fiestas masivas en la zona que circunda el muelle Los Castaños y el parque Anwandter, justo frente al Colegio Alemán. 

“Desde que se levantaron las restricciones de la pandemia, ha habido muchas fiestas con mucha música a alto volumen y griterío. Dichos disturbios comienzan alrededor de la medianoche y se prolongan hasta las 6 o 7 de la mañana. Muy a menudo aparecen personas, en manifiesto estado de ebriedad, surgiendo violentas peleas y destrozos en la vía pública. Asimismo, vienen muchos vehículos a entregar, no solamente delivery, sino que también otros no determinables”, narra un vecino del sector que prefirió reservar su identidad. 

Pero esto es sólo el comienzo. Otro vecino, cansado de soportar el ruido varias noches a la semana, y con sus padres enfermos, salió a conocer una noche de manera infiltrada cómo funcionan estos encuentros clandestinos a los que acuden, de acuerdo a las versiones de los entrevistados, entre 300 y 500 personas. 

“Y fui al Muelle. Y ahí, claro, el tema es distinto. Mucha gente, cero cuidado con el tema del COVID, y lo más impactante fue la cantidad de tráfico de coca. Niños y niñas muy jóvenes, inclusive menores de edad, muy chicos, jalando cocaína”, narra el vecino que asistió a uno de estos encuentros a Diario de Valdivia.   

Además del abundante consumo de alcohol y otras sustancias, agregó, hay testimonios de actos sexuales en plena vía pública y a la luz del día.

“Los vecinos del sector hoy no puede usar estos espacios públicos tomados por hordas de jóvenes sin ningún escrúpulo. Los juegos de las plazas hoy son asientos de pub al aire libre donde consumen toda clase de alcohol y drogas”, concluye un habitante del barrio. 

DRAMÁTICO ANTECEDENTE 

Hace menos de un mes, y a sólo un par de cuadras, en el Parque Santa Inés, falleció acuchillado un joven de 22 años producto de una riña en este tipo de reuniones. 

“Lamentablemente, nos tenemos que organizar y elevar nuestras preocupaciones a las autoridades, objeto evitar un nuevo asesinato como el ocurrido en el Parque Santa Inés. Las condiciones para que un nuevo episodio así ocurra nuevamente, se dan en toda magnitud en el sector del pasaje los Castaños hasta la destinación marítima entre las 21:00 hrs y las 07:00 hrs, todos los días”, señala un oficio distribuido entre vecinos del sector.

Por ahora, se señala, la actividad ha mermado un poco producto de redadas hechas por Carabineros, aunque todos reconocen que la fuerza policial no da abasto.

“Nos explicaron la deficiencias que tienen hoy día las policías para controlar este tipo de situaciones. Pero a pesar de eso se han portado re bien y han hecho varias rondas de vigilancia con lo que disminuyó bastante el tema”, explican desde calle Los Castaños. 

No obstante, lo verdaderamente preocupante es que independientemente de la locación, el fin de la pandemia ha hecho visible un extenso grupo de jóvenes, y no tan jóvenes, que consumen drogas en correlación con el explosivo aumento de decomisos reportados por Carabineros de Los Ríos. 

Estos testimonios, imágenes y antecedentes son más piezas de un puzzle que muchos tienen miedo de completar.